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A la Sagrada Majestad de la VERDAD

Thomas Taylor

martes, 27 de enero de 2009

Congreso Mundial Teosófico

Hola amigos
Se desarrollará en Roma, Italia, del 10 al 15 de Julio de 2010 (en año y medio) el Theosophical World Congress o Congreso Mundial Teosófico, cuya última versión se celebró en Sydney, Australia. Estos congresos se celebran con poca regularidad, creo que originalmente se pensó en hacerlos cada 7 años, pero según entiendo ha sido difícil. Sin embargo continúan siendo una bonita oportunidad para interactuar con teósofos de todo el mundo y compartir experiencias.
Los datos que tengo al respecto son los siguientes: Hotel cuatro estrellas Summit hotel and Convention Centre, Via della Stazione Aurelia 99 en Roma. 88 Euros en habitación compartida y 110 en habitación individual. El precio incluye acomodación y tres comidas. Creo que este valor es por noche. Para mayor información visitar la página web de La Sociedad Teosófica en Italia. http://www.teosofica.org/
Es interesante saber que La Sociedad Teosófica en Italia es una organización muy activa en muchos campos con personalidades importantes entre sus miembros, además de miembros muy comprometidos con la Teosofía y la Sociedad Teosófica. Cuenta con una importante editorial teosófica, con publicaciones propias escritas por teósofos italianos.

Anímense y vayan planeando su viaje.

El pasado masónico (y teosófico) del Ateneo de Madrid

Hola amigos de Teosofía-Una.

Una entrada de nuestro interés acaba de ser publicada en el agradable, honesto e interesante blog del Sr. Javier García Blanco http://arssecreta.com/ Esta entrada tiene que ver con El Ateneo de Madrid y su historia. Mario Roso de Luna "el mago rojo de Logrosán" dictó varias conferencias en este centro cultural. Es bueno recordar que a Roso de Luna le gustaba la designación de "Teosófo y Ateneista" precisamente por sus labores en el Ateneo. Me alegran mucho las buenas noticias sobre El Ateneo de Madrid. La entrada completa de arssecreta la podeis ver en este link: http://arssecreta.com/?p=842
Igualmente el blog del Sr. García Blanco tiene otras entradas relacionadas con el arte y la Teosofía, las cuales encontrareis de sumo interés. Por ejemplo Frantisek Kupka, el viajero del astral en este link: http://arssecreta.com/?p=144; El simbolismo ocultista de Jean Delville en el link: http://arssecreta.com/?p=46; Karel De Bazel: arquitecto, teósofo y masón en el link: http://arssecreta.com/?p=34; Piet Mondrian, teósofo y esoterista en el link: http://arssecreta.com/?p=27 y varias otras entradas de variados temas en su mayoría muy buenas.
Definitivamente el blog del Sr. García Blanco es digno de visitarse con asiduidad.

Muchas gracias

jueves, 15 de enero de 2009

PARA UNA NUEVA CONSCIENCIA UNA NUEVA TELEVISIÓN: TVSUPREN

Qué es TV Supren?

El ser humano como fundamento principal y como objetivo final de todas las realizaciones. Una sociedad basada en la solidaridad, en la igualdad de oportunidades y en la justicia social. La armonía con la naturaleza como condición imprescindible para una vida sustentable en nuestro planeta.
Estos son los tres aspectos de una nueva propuesta de televisión: la propuesta de TV Supren. Expresados por el logotipo de esta nueva televisión. TV Supren es un nombre inspirado en una palabra el idioma Esperanto que indica "hacia la cima", "hacia lo alto", lo mismo que up en inglés. Esto es lo que refleja esta nueva propuesta de televisión: valorizar la dimensión espiritual del ser humano, promover los valors éticos, mostrar lo que es bueno, bello y verdadero como el norte de referencia para la humanidad.
TV Supren es el canal de comunicación y acción de Unión Planetaria, una ONG con sede en Brasilia, Brasil, que congrega y apoya el movimiento mundial por la renovación de estructuras sociales y el ejercicio de la ciudadanía solidaria con una visión planetaria.

Ver: www.uniaoplanetaria.org y www.tvsupren.com.br

domingo, 11 de enero de 2009

LOS CAMPOS MORFOGENÉTICOS Y EL AKASHA

(Una conversación entre el Dr. Rupert Sheldrake, Dora Kunz, La Dra. Reneé Weber y Will Ross.)

The Theosophical Research Journal, Vol. II Nº 1, Marzo 1985

Extraído de Cambios, revista teosófica Argentina. 1993 Nº 14 Abril-Junio y Nº 15 Julio-Septiembre.

INTRODUCCIÓN

El Dr. Rupert Sheldrake, autor de A New Science of Life (Una Nueva Ciencia de la Vida), explicó el concepto básico de su teoría. Además de los ya conocidos campos de la ciencia, tales como los campos gravitatorios, Sheldrake ha lanzado la hipótesis de los campos morfogenéticos o campos-M. Dice que estos campos son estructuras organizadoras invisibles que moldean o dan forma a cosas como cristales, plantas y animales, y también tienen un efecto organizador sobre la conducta. En otras palabras, este campo se convierte en una especie de modelo o esbozo que regula y organiza unidades subsiguientes del mismo tipo. Las unidades subsiguientes se “sintonizan (o resuenan) con el arquetipo” previamente creado, que puede actuar a través del tiempo y del espacio, y luego se repiten. Expuesto de otra manera, a medida que se forma y desarrolla cada unidad nueva, esta refuerza el campo-M y se arraiga el “hábito”. Esta teoría se extiende desde los cristales moleculares a los complejos organismos vivos. Un punto importante es que se hace progresivamente más fácil y más rápido para las unidades subsiguientes adoptar la estructura, cualquiera que sea la especie de que hablemos. Finalmente, la estructura aparece inherente y virtualmente sin cambios.
Sheldrake primero examinó la programación genética convencional y la doctrina del ADN. Según ésta, la manera en que un organismo se desarrolla está de alguna manera “programada” en su ADN. Entonces arguyó que el ADN realmente codifica la secuencia de aminoácidos que forman la proteína. Pero desde el punto de vista de los campos-M, la forma y la organización de las células, tejidos, órganos y organismo como un todo está gobernado por una jerarquía de campos morfogenéticos que no se heredan químicamente sino que, por el contrario, se dan directamente por resonancia mórfica de los organismos anteriores de la misma especie.
Para aclarar esta idea el Dr. Sheldrake utilizó la analogía de un receptor de televisión. Imagine una persona que no conoce nada sobre electricidad. Se le enseña un receptor de televisión por primera vez. Al principio puede pensar que el aparato contiene realmente personas pequeñas, cuyas imágenes aparecen en la pantalla. Pero después de mirar en su interior y encontrar tan solo cables y transistores, puede suponer que las imágenes surgen de alguna manera de complicadas interacciones entre los componentes del aparato. Esta teoría parecería particularmente plausible a la luz del hecho de que las imágenes se distorsionan o desaparecen cuando se quitan algunos componentes. Si entonces se le sugiriera que de hecho las imágenes dependen de influencias invisibles que entran en el aparato desde muy lejos, lo podría rechazar. Su teoría de que nada entra en el aparato desde el exterior se reforzaría por el descubrimiento de que el aparato pesó lo mismo tanto si está conectado como si no.
Este punto de vista puede asemejarse al enfoque convencional de la biología, donde los cables, transistores, etc., corresponden al ADN, las moléculas de proteína, etc Sheldrake está de acuerdo en que los cambios genéticos pueden afectar la herencia de la forma o del instinto alterando la “sintonización” o introduciendo distorsiones en la “recepción”. Pero los factores genéticos por sí mismos no pueden explicar plenamente la herencia de la forma y del instinto, de la misma manera que las imágenes particulares en una pantalla de televisión no se pueden explicar solamente en términos de su diagrama de cableado.
Ya que, en el enfoque de Sheldrake, el sistema nervioso humano también está gobernado por campos-M, el mismo principio sería válido para los seres humanos. Esto tendría grandes implicancias para nuestra comprensión de cómo y por qué la gente aprende. Un aprendizaje de este tipo sería por lo tanto una clase de herencia de las especies básicas y “recordada” más o menos automáticamente. No estaría, para nada, localizada en el cerebro individual, sino que se daría directamente de la estructura de la especie por medio de la resonancia mórfica. Así las experiencias acumulativas de la humanidad incluirían, por supuesto, las formas arquetípicas descritas por Jung.
Ralph H. Hannon

Dora Kunz: La cuestión que vamos a debatir es si existe una relación entre el concepto de Campos Morfogenéticos y el Akasha. Según mi comprensión de los campos-M, la memoria desempeña un papel importante en el concepto y me pregunto si eso podría ser una posible relación con el concepto de Akasha. Tal vez podríamos empezar definiendo los Campos-M y posteriormente discutir el papel de la memoria.
Rupert Sheldrake: Los campos-M son campos que moldean las formas: morfo – forma, génesis – venir a la existencia. Son campos relacionados con la entrada a la existencia de la forma, y son responsables de modelar y ordenar los sistemas de cualquiera que sea su nivel de complejidad – átomos, moléculas, cristales, células, órganos, organismos.
La estructura de los Campos Morfogenéticos la proporcionan las formas mismas de los sistemas anteriores por medio de la resonancia mórfica, el proceso por el que lo semejante actúa sobre lo semejante. La resonancia mórfica significa que los campos-M contienen por decirlo así, una memoria tosca o colectiva – las especies – que es inherente al campo.
La idea de una memoria que va acumulando a través del tiempo es esencial en este concepto. Tal como yo entiendo la idea de Akasha incluye una especie de memoria de todo lo que sucede, pero para mí no está claro si se piensa en el registro akásico como una especie de banco gigante de memoria. Si se imagina de esta manera, existe la cuestión, de un organismo dado, un conejo, por ejemplo, puede recuperar información del banco de memoria del registro akásico. Normalmente, a fin de recuperar la memoria de una biblioteca o de un banco de información es necesario saber como tener acceso a una memoria particular. Creo que ocurre por medio de la resonancia mórfica, la sintonización de lo semejante con lo semejante. Si el registro akásico es una especie de banco de memoria generalizado y no específico, la pregunta es ¿cómo se puede extraer algo de él? Si se extrae sobre la base de la similaridad con lo que se introdujo, entonces la idea del registro akásico es similar a la de la resonancia mórfica. Lo que esto significa es que existe un vínculo directo de una cosa en el pasado con una cosa similar aquí en el presente. La única diferencia sería que el registro akásico es el dispositivo de almacenamiento.
Dora Kunz: Tal vez deberíamos considerar el significado de la palabra Akasha en la filosofía india, porque hay una diferencia.
Reneé Weber: En la filosofía india se asocia con el espacio – aquello que irradia en todas direcciones. La idea de Akasha se asocia, en primer lugar, con el sonido como Elemento primario. Esta relación fundamental del Akasha con el sonido no solo establece a la resonancia como un factor primario en el desarrollo de los sentidos, sino también en el desarrollo de las formas. Esto se da a entender en el enunciado bíblico, “Al principio había la Palabra y la Palabra era Dios”. El sonido se relaciona con la vibración y lo que es interesante es que la teoría de la resonancia mórfica necesita una especie de armonización de la similitud vibratoria. Por lo tanto en ese sentido habría otro vínculo entre la resonancia mórfica y Akasha.
Rupert Sheldrake: Probablemente Akasha signifique espacio, y si es así, algo en ele espacio, un conejo, por ejemplo, está vibrando: está respirando, su corazón está latiendo, levanta sus orejas, etc. Se mueve de muchas maneras distintas; no es una forma estática. Ya que todo este modelo de actividad del conejo ocurre en el espacio, que también está en el Akasha, esa forma y ese modelo de vibraciones, tal vez marquen el Akasha en el lugar donde está el conejo.
Reneé Weber: La única parte que me preocupa es cuando dices “en el lugar donde está el conejo” ¿Crees que Akasha, siendo un campo está tan estrictamente ligado a una localidad?
R. Sheldrake: Bien, los campos tienen una naturaleza dual. Un aspecto es que son extensos y el otro es que están relacionados con localidades. Si Akasha significa espacio, y el conejo está en un lugar particular en el espacio, esto debe significar una modificación del campo akásico en ese lugar. Similarmente, el campo gravitatorio está extendido por todo el universo, pero se modifica mucho en presencia de la materia. El campo gravitatorio alrededor de la tierra es distinto del que habría en medio del espacio intergaláctico, precisamente porque la tierra está aquí.
R. Weber: Sí, si el Akasha se ha de modificar por la presencia de la materia ha de ser capaz de registrar algo.
Voy a desplazar nuestro foco de atención un minuto. A medida que pienso en otros campos, otros planos de la naturaleza, tales como el campo emocional (utilizaste la palabra campo “astral”) o el campo conceptual o mental, parece que tienen sus propias características que los organismos ponen de manifiesto, pero a su vez los organismos también afectan al campo. Si en un lugar dado en el campo emocional existe mucha violencia, el campo emocional al instante lo almacena o lo amplifica. Hay una repetición hacia atrás y hacia delante. En otras palabras tomamos las características del campo, pero también es amplificado por nuestros pensamientos y sentimientos. ¿Trabajaría el Akasha de una manera similar?
D. Kunz: Supongo que si hablamos del espacio y lo relacionamos con los campos, el Akasha abarcaría todos los campos, incluso el gravitatorio.
R. Sheldrake: Me figuro que es así. No creo que tuviera ningún sentido decir que el campo gravitatorio es lo mismo que el Akasha.
D. Kunz: No puede ser. ¿Sería un componente suyo?
R. Sheldrake: Mire, no sé exactamente qué es el Akasha. Estamos tratando de descubrir lo que es. Una posibilidad es que sea una clase de campo o campos; un campo que incluya a todos los demás. Si el campo akásico es el campo de todas las clases de espacios posibles, incluyendo el espacio que es curvado por el campo gravitatorio, aquel que es modificado por el campo electromagnético, el espacio que es afectado por los pensamientos y las emociones, el espacio interno de la conciencia – todos los tipos de espacio posibles que existen, físicos, mentales, emocionales, e intencionales – entonces habría una clase de campo o campos que incluirían todos los otros campos.
También me gusta la idea teosófica del alma grupal. Mire, no estoy seguro de que crea que nos reencarnemos. Pienso que puede suceder de vez en cuando a algunas personas, pero no como regla general. Me temo que tengo una visión heterodoxa. Creo que estamos influenciados por un gran número de influencias de las vidas pasadas a través, por ejemplo, del inconsciente colectivo, pero no que exista necesariamente una relación uno a uno. No tengo ninguna manera de saber, por ejemplo, si fui un campesino indio hace quinientos años y un pescador griego antes de eso, etc. Al no tener ninguna experiencia de las vidas anteriores no veo ninguna razón de por qué hemos de suponer que ha habido esa conexión directa de uno a uno en lugar de influencias múltiples actuando desde las vidas pasadas de personas ahora fallecidas. Si estoy influenciado por cientos, miles, millones de personas del pasado, en cierto sentido soy todas esas personas reencarnadas. Me doy cuenta de que la teoría normal de la reencarnación es que cada uno de nosotros nace en una secuencia de nacimientos lineales en el tiempo, pero, personalmente, no veo ninguna razón para creerlo.
R. Weber: Ya que no hemos definido el Akasha, sino que lo hemos circunscripto, me gustaría preguntar si se encuentra en el mundo fenomenal.
R. Sheldrake: Estamos sugiriendo que es la base de los fenómenos, que todos los fenómenos deben ocurrir como manifestaciones en el espacio. Incluso las alucinaciones o los sueños son fenómenos en algún tipo de espacio. En los sueños nos podemos mover alrededor, ver gente, etc.
D. Kunz: Supongo que las alucinaciones tienen lugar en el espacio de la mente.
R. Sheldrake: Sí. Defino el espacio de la mente como una clase de espacio. Los tibetanos hablan sobre la continuidad entre el espacio de la mente y el espacio físico. Estoy encantado con el concepto tibetano del espacio, pues, tal como yo lo entiendo, existe una semejanza, en realidad una analogía, entre el espacio mental y el espacio físico. No separan los dos de la manera que nosotros estamos acostumbrados a hacerlo. Ya que Akasha es una parte del pensamiento oriental, parece necesario incluir el espacio mental en él. Por lo tanto, todas las manifestaciones tienen lugar en el Akasha.
Pero, incluso si tomamos únicamente el universo físico en un determinado sentido, la conciencia deambula por él. Ahora que tenemos teorías sobre las estrellas que se encuentran en galaxias lejanas, y mediciones del desplazamiento del rojo en las líneas del espectro, el universo en contracción, e incluso, el mismo hecho que podamos mirar las estrellas a través del telescopio y decir que se encuentran a un millón o a mil años luz, significa que la conciencia se extiende por el espacio y crea este vasto universo. Podéis decir que el universo está ahí, independientemente de nuestra conciencia. Porque tenemos una conciencia creciente de un universo infinitamente más vasto de lo que le parecía a la gente unos cuantos miles de años atrás. Por lo tanto, en cierto sentido, cuando estudiamos las galaxias lejanas nuestra conciencia se extiende por el espacio.
R. Weber: De hecho, se ha observado que muchas personas que no son de temperamento místico, sino solo personas corrientes, en realidad experimentan una sensación de conciencia en expansión cuando miran a los cielos viendo este firmamento ilimitado, lo cual parece ser no solo un símbolo sino una experiencia real del carácter expansivo del espacio.
D. Kunz: Ya que el Akasha se relaciona con el espacio y los campos se encuentran en el espacio, Will lo considera como el substrato omniabarcante, mientras que tú lo consideras como un campo omniabarcante.
R. Sheldrake: Permitidme que pregunte a Will como ve el funcionamiento del substrato. Si lo que hay dentro del substrato lo modifica, entonces tendría que adoptar forma, estructura y diferenciación. Ahora bien, el espacio universal o substrato existe por todo el universo, incluyendo aquí mismo donde estoy sentado. Por lo tanto, la presencia y forma de mi cuerpo deben estar afectando al Akasha y, consecuentemente, debe estar sometido a alguna clase de modificación como resultado de mi presencia aquí.
Will Ross: Supongo que todas las cosas manifestadas sufren modificaciones. Esta es la esencia de la manifestación, ¿no es así?
R. Sheldrake: Así pues, mientras el Akasha se manifieste sufrirá modificaciones.
W. Ross: Correcto.
R. Sheldrake: Por lo tanto no lo consideras como un substrato indiferenciado de la manifestación, sino más bien como algo que está incluido en toda la manifestación.
W. Ross: Si, creo que las modificaciones tienen lugar en algo y eso es el Akasha.
R. Sheldrake: En ese sentido lo podríamos describir como un campo, porque un campo no es un substrato perfectamente uniforme. Un campo es una extensión espacial, un continuum espacial con modificaciones.
W. Ross: Por supuesto, me inclino a pensar de esa manera. Realmente, cuando Einstein buscaba un campo universal estaba buscando el Akasha.
R. Sheldrake: Si decimos que el Akasha es una especie de campo fundamental, un campo que incluye todos los otros campos, eso sería como decir, poco más o menos lo mismo.
D. Kunz: ¿Cuál crees que es el papel de los campos-M?
R. Sheldrake: Creo que el papel de los campos-M está en el desarrollo de modelos formales de átomos, moléculas, cristales, células, tejidos, organismos y también de modelos de conducta.
R. Weber: Es en esta parte donde creo que la teoría no está clara. Puedo ver que su función sería de desarrollo, pero en este proceso se omite un paso importante: ¿Cómo aparece el organismo en primer lugar? Una vez que tiene el organismo el papel del campo-M es claro. Pero el campo no proporciona la información original para que el organismo sepa lo que ha de ser, de manera que luego pueda realimentar al campo. La pregunta que continúa surgiendo una y otra vez es ¿cuál es su función, exceptuando la de una especie de duplicador? No es el creador de las formas.
R. Sheldrake: Con respecto al organismo, si tomamos una especie en particular, digamos los pollos, existen millones de gallinas desarrollándose en este mismo momento en todo el mundo a partir de los huevos. El sistema sintonizador es el huevo de la gallina; es de donde proceden los polluelos. El polluelo viene del huevo y el huevo viene de la gallina; ambos son parte de un sistema continuo. En la medida en que el campo-M explica las repeticiones, el problema se asocia con el primero de cualquier especie. Ahora bien, la inmensa mayoría de los organismos que vemos a nuestro alrededor no son, por supuesto, los primeros de su especie. De hecho, dudo que alguno de nosotros haya visto jamás al primero de una especie. Por lo tanto, esta teoría puede dar cuenta de la gran mayoría de casos de morfogénesis.
Ahora bien, la cuestión de dónde vienen los primeros implica la aparición de un nuevo campo en el Akasha. Cuando preguntamos, ¿cuál es la base de este nuevo campo? ¿de dónde procede? Existe una amplia gama de posibilidades. Se podría decir que el mismo Akasha es la base de este nuevo campo, le da un papel creativo. Entonces aparece algo como la idea de sunyata, el vacío creador.
R. Weber: Creo que el punto de vista más teosófico sería el de que la forma está en la materia misma, porque la materia es siempre consciente y creadora al miso tiempo. No es necesario añadir otro principio, porque el universo entero está evolucionando y expresándose. Por lo tanto, la primera forma de cualquier especie surgiría de dentro del sistema mismo y luego se realimentaría en los dos sentidos, tal vez de la manera que has sugerido.
R. Sheldrake: Para volver a la cuestión de la función del campo-M, una vez que el primer organismo de una especie ha aparecido, la función podrá ser guardar el modelo asociado con aquella y luego realimentarlo en ambos sentidos. Se podría decir que se convierte en una especie de forma de pensamiento gigante.
La característica esencial de los campos-M es éste elemento de realimentación. El motivo por el que difieren de los arquetipos platónicos, por ejemplo, es que los arquetipos se consideran totalmente fijos. Siempre han sido, siempre serán. Los arquetipos platónicos se reflejan imperfectamente en las formas cambiantes del mundo. Es una relación de un solo sentido, porque lo que ocurre en el mundo es una cuestión distinta para los arquetipos. Se podría decir que el arquetipo platónico de un pollo existía en el momento del Big Bang, veinte mil millones de años atrás y que existirá veinte mil millones de años después, cuando ya no pueda realizar ningún servicio, pues los pollos habrán desaparecido de la tierra mucho tiempo antes.
R. Weber: Hay dos cosas que me gustaría decir. Primero, no estamos seguros de que Platón utilizara los arquetipos de esta manera tan rígida; y segundo, ¿existe alguna diferencia real entre ellos y lo que tú has descrito? Digamos que los campos-M de los dinosaurios todavía están con nosotros. ¿Cuál es la diferencia?
R. Sheldrake: Yo diría que los campos de los dinosaurios están aquí, pero que no existían antes de que aparecieran los dinosaurios. La diferencia entre mi modelo y la descripción mecánica habitual (cuyo origen es profundamente platónico) es que la ciencia convencional ordinaria diría que la primera vez que un nuevo componente cristalino entra en la existencia, la forma está completamente determinada por las llamadas leyes de la naturaleza, la fórmula matemática, etc, etc. Las leyes son fijas; son preexistentes. Lo que yo digo es que tiene lugar un proceso de realimentación. Esto resulta ser comprobable experimentalmente.
R. Weber: Teosóficamente, debe haber algo por el estilo, porque sino todo el fenómeno de estar en el mundo, del desarrollo, y evoluión, perdería su significado. El tiempo se realimenta en lo llamado intemporal. Es una cuestión multidireccional; hay un espejo de dos sentidos.
W. Ross: Es la vida en evolución. Los campos-M están relacionados con las formas que esa vida desarrolla, un cambio en las formas que forman parte del proceso viviente.
R. Weber: De lo que Rupert dice, supongo que el sistema de recuperación está conectado con el modelo de vibraciones y la similitud casi como un imán.
R. Sheldrake: Sí, un embrión de conejo estará conectado con el campo-M del conejo. Pero si pensamos en el Akasha como que incluye una memoria cósmica, entonces se tendrán en cuenta automáticamente las leyes normales de memoria y asociación, etc. Las maneras normales por las que pensamos en la memoria en funcionamiento son, por cosas como la asociación, contigüidad, o algún tipo de similitud. Si percibimos un olor, nos recuerda circunstancias asociadas con el hecho de haberlo olido antes y si fue una experiencia bastante inusual, simplemente el hecho de captar un ligero olor de aquel perfume puede evocar toda una escena. Si hablamos de Akasha como de una memoria cósmica, entonces sería evocada por similitud. Si la resonancia mórfica es un aspecto de esto, entonces un embrión de conejo y una asociación atraería la memoria de las características de los conejos, la forma del conejo a partir de conejos previos todos los cuales estarían en el registro akásico y en la memoria cósmica. El resultado vendría a ser más o menos el mismo, pero el fenómeno tendría lugar en un marco muy diferente.
W. Ross: H. P. Blavatsky dice en uno de los comentarios a la Estancia 1 de La Doctrina Secreta: “El hombre fuerte en yoga puede unir su alma con el Alaya del universo.” Esto es en realidad la memoria de todo el universo y, una vez más, es la descripción que utilizan los budistas con respecto al Buda, justo antes de que alcanzara la Iluminación.
R. Weber: Esto introduce la cuestión del tiempo. No crees que “el hombre fuerte en yoga” vive en el presente intemporal en el que todo es ahora?
W. Ross: No, no lo creo. Creo que mientras hay manifestación, hay tiempo. La conciencia es una concomitancia del tiempo. Pero me inclino a pensar que el tiempo tiene dimensionalidad, y que de la misma manera que tenemos tres dimensiones del espacio, probablemente tengamos tres dimensiones del tiempo. Esto nos podría conducir a un universo que es bastante consistente con nuestro sistema septenario.
Creo que la mayoría de nosotros hemos experimentado un período intemporal, pero, por supuesto, no sabemos que lo estamos experimentando en aquel momento. Si sabes que lo estás experimentando, te encuentras en el tiempo. Este es uno de los grandes problemas. He utilizado el término “universo intemporal” porque es una frase bonita que lo distingue del día ordinario de 24 horas. Según las Estancias, el único estado en el que hay tiempo es en el pralaya.
R. Weber: Pero ahora estamos hablando de tiempo desde el punto de vista de la conciencia. Cualquiera que se salga de la rueda de samsara ya no está sujeto al tiempo inevitable. Puede utilizar el tiempo convencional para captar un plano, pero como experiencia interna el tiempo ya no lo atrapa del mismo modo.
W. Ross: Estoy totalmente de acuerdo con esto. El tiempo no nos afecta de la misma manera. Pero, a menos que entremos en pralaya, el tiempo existe en algún sentido.
R. Sheldrake: El tiempo está intrínsecamente relacionado con toda la cuestión de la memoria. Sobre esta experiencia intemporal no tengo nada que decir, pues nunca le he experimentado realmente. Pero la noción del tiempo en el sentido normal del término, es claramente intrínseca al desarrollo de la memoria, así como a la conciencia normal, y la manifestación está claramente ligada a él. En realidad, si Akasha está relacionado con el sonido o vibración entonces la vibración no tiene ningún sentido sin el tiempo. La vibración está fundamentalmente relacionada con un esquema en el tiempo. Por lo tanto, en la medida en que la manifestación dependa del modelo vibracional de la ciencia, está inevitable y necesariamente en el tiempo. Hemos logrado liberarnos de la idea del banco de memoria a favor de la memoria cósmica. El Alaya Vijnana de la tradición Mahayana, que es una especie de memoria cósmica es, presumiblemente, el origen de la idea de los registros akásicos, ya que ese término no aparece en La Doctrina Secreta.
R. Weber: Memoria cósmica suena como más vivo y no tan dualista. Es como si el mismo universo recordara; no hay necesidad de ningún registro objetivo.
W. Ross: No creéis que el karma es básicamente una expresión del hombre con el hombre, con el cosmos? Es el principio que los relaciona en este proceso.
R. Sheldrake: Veamos, el karma se puede tomar, ya sea en el sentido limitado del karma humano o en un sentido mucho más general, como dan a entender los Upanishads. En este sentido más amplio, podría conducir a algo como la idea de memoria cósmica en la que todas las acciones, ya sean de una planta o de un conejo, están presentes continuamente. En este sentido el karma es un principio de hábito de memoria.
R. Sheldrake: No simplemente la relación del hombre con el cosmos, sino del cosmos consigo mismo. Un aspecto diminuto de la memoria general o principio de hábito kármico sería lo que les sucede a los seres humanos. Las partes más extensas del vasto universo, que no tienen gente, hasta donde sabemos, todas funcionarían también según este sistema de memoria kármica. El karma humano es lo que nos interesa a nosotros, pero eso es solo una parte de él. De la manera que la gente habla normalmente del karma en el Hinduismo más reciente lo asocian solamente con la reencarnación humana, como si no estuvieran interesados en el resto del universo, y así obtenemos una visión muy estrecha de todo el asunto.
R. Weber: El karma se puede entender como causación universal, y la causación universal abarca todo el mundo, con todos sus cambios. Lo que Will mencionó antes me recuerda lo que David Bohm también ha dicho, es decir, que el Big Bang no es una cosa tan importante. Probablemente, en este océano de energía hubo una honda que se salió y se quedó quieta, y eso es lo que llamamos el Big Bang. Por lo tanto, hubo antes alguno de esos sucesos y habrán algunos después. El Big Bang es el karma del mundo manifestado.
R. Sheldrake: Raymond Panikar escribe cosas muy interesantes sobre este tema. Muchos hindúes y muchos budistas Theravada piensan en el karma simplemente en términos de reencarnación humana. En la Universidad monástica de Ceilán hablé con algunos monjes muy eruditos sobre este tema. Ante todo pensaban en términos de karma humano, aunque decían que el mismo tipo de cosa podía ocurrir en los animales superiores. Cuando pregunté sobre las plantas y los cristales, dijeron que sólo eran materia. Dieron la impresión de hundirse en una especie de visión materialista o mecanicista de todo lo demás.
D. Kunz: Estaría de acuerdo en que el Budhismo Theravada en particular, no tiene prácticamente una visión cósmica del mundo?
R. Sheldrake: Bien, esa es la impresión a la que llegué. Pero la mayoría de hindúes tampoco piensan sobre estas cosas de una manera amplia y general. En realidad, es el Budhismo Tibetano y el Mahayana en general el que ha ido más lejos.
R. Weber: Si los hindúes fueran fieles a su propia tradición tendrían una visión más amplia porque, ¿qué es pralaya y manvantara sino el estado de evolución y de reposo de todo el universo, el Día y la Noche de Brama?
R. Sheldrake: El aspecto energético de este concepto es intrínseco. Nataraja, del que mucha gente cree que es la imagen hindú de Shiva, de hecho, no está tan comúnmente asociado con Shiva para la mayoría de los hindúes como lo está el Lingam. Nataraja se encuentra primeramente en el sur de la India y, muy especialmente, en el Templo de Chitambaram, uno de los cinco grandes templos de Shiva del sur de la India. Existen templos de Shiva para cada uno de los elementos: Tierra, Agua, Aire, Fuego y Akasha. El Templo de Shiva, en su aspecto de Akasha, está en Chitambaram. Por lo tanto, el Shiva que danza, el Nataraja, está en el templo de Akasha en Chitambaram. En muchos templos del norte de la India Nataraja no es en absoluto una imagen común de Shiva. Se ha popularizado mucho en Occidente y por eso mucha gente piensa que es una imagen Standard, pero no lo es.
R. Weber: ¿Qué implicaciones saca de esto?
R. Sheldrake: Me parece destacable que esta imagen particular de Shiva en el aspecto energía, se asocie con el templo de Akasha, lo que implica que la idea de la danza cósmica de la energía está vinculada a la noción de Akasha. Esto encajaría en el concepto de sunyata como un vacío activo, eso es, la máxima potencialidad de la cual provienen todas las cosas, más bien que como un vacío en el sentido de la nada.
R. Weber: El Dalai Lama ha expresado claramente que sunyata es sencillamente la fuente de todo. Es plenitud, no la vacuidad en el sentido occidental de algo que no contiene nada. Es potencial.
Tu teoría, Rupert, ha sido criticada algunas veces a causa que implica que el campo-M es causado por las formas. En otras palabras, una cosa tiene propiedades y características que el campo llega a aprender y a almacenar, y luego fructificarán cosas similares debido a ese aprendizaje.
R. Sheldrake: Esa es toda la cuestión de donde sale el primer campo. Sencillamente, replicaría con una pregunta: ¿De dónde salió el primer campo magnético? Se da por sentado que los campos magnéticos se producen porque pueden contener imanes, existe una analogía. Un campo-M alrededor de un huevo de gallina está asociado con aquella estructura material, de la misma manera que el campo magnético está asociado con el imán. Si preguntamos, ¿dónde está el origen del campo-M de la gallina? Pienso que también podemos preguntar cuál es el origen del campo magnético. En el momento del Big Bang, a una temperatura de unos diez millones de grados centígrados, no había materia. No había ni siquiera átomos. Básicamente, todo lo que existía era radiación. Por lo tanto, hubo un momento en la historia del universo en el que el primer imán llegó a la existencia.
R. Weber: Lo pondré de otra manera. Lo que has dicho es verdad, pero lo que establece el campo magnético no es eterno. Pero una vez llegado a la existencia, todo el campo puso de manifiesto el potencial para el magnetismo. Esto se convierte en la vieja pregunta, ¿es lo particular lo que tiene la característica y luego lo universal, o es al revés? Aquí es donde estamos encallados.
W. Ross: ¿Viene primero la gallina o el huevo?
R. Sheldrake: Los dos están asociados, no hay duda.


Akasha: en términos modernos se puede sugerir que Akasha es un substrato o substancia del universo homogéneo y sin estructura. Sin poseer ningún tipo de propiedades, paradójicamente tiene la posibilidad de tener cualquier número de propiedades impuestas o creadas en él – dimensiones de cualquier número, materia de cualquier orden primariamente por la acción de Fohat, o energía básica, “cavando agujerasen el espacio akasha” y de transmitir toda la gama posible de ondas de energía.
Definición Del libro: Key Words of the Wisdom Tradition por L. J. Bendit. The Theosophical Press, Wheaton, Illinois, 1963. 1era edición.

LA NAVIDAD DE ENTONCES Y LA DE HOY

Christmas then and Christmas now, The Theosophist, Vol. I, No. 3,
Diciembre, 1879, pp. 58-59


H.P. Blavatsky



Estamos alcanzando la época del año en que todo el mundo cristiano se está preparando para celebrar la más notable de sus solemnidades, el nacimiento del Fundador de su religión. Cuando este artículo llegue a sus suscriptores occidentales habrá festividad y regocijo en cada casa. En Europa Noroccidental y en Estados Unidos el acebo y la hiedra decorarán cada hogar y las iglesias estarán cubiertas con siemprevivas, una costumbre derivada de las antiguas prácticas de los druidas paganos “cuyos espíritus silvestres podían reunirse en las siemprevivas y permanecer intocados por la helada hasta una estación más templada”. En los países católicos romanos grandes multitudes se reúnen durante toda la tarde y la noche de la “Víspera de Navidad” en las iglesias, saludan imágenes de cera del Divino Niño y de su Madre Virgen, en su atavío de “Reina del Cielo”. Para una mente analítica, este desafío de rico oro y encaje, bordado de perlas, satén, terciopelo, y la cuna enjoyada, parecerá bastante paradójico. Cuando uno piensa en el pobre, carcomido, sucio pesebre de la posada judía en que, si damos crédito al Evangelio, el futuro “Redentor” fue colocado en su nacimiento por carecer de un refugio mejor, no podemos dejar de sospechar que, ante los ojos deslumbrados del sencillo devoto, el establo de Belén desaparece completamente. Para ponerlo en términos suaves, esta llamativa exhibición parece inapropiada de los sentimientos democráticos y el desprecio realmente divino por las riquezas del “Hijo del Hombre” quien no tenía “en donde apoyar su cabeza”. Se vuelve más difícil para el cristiano medio considerar la declaración explícita de que “es más fácil para un camello pasar a través del ojo de una aguja, que para un hombre rico entrar en el reino de los cielos”, como cualquier otra cosa que una amenaza retórica. La Iglesia Romana actuaba sabiamente al prohibir con severidad a sus feligreses leer o interpretar por sí mismos los Evangelios y dejando al Libro, imaginando que esto fuese posible, proclamar sus verdades en latín –“la voz que clama en el desierto.” En esto ha seguido a la sabiduría de las edades, la sabiduría de los antiguos arios quienes también son “justificados por sus niños”; pues, como ni el moderno devoto hindú entiende una palabra del sánscrito, ni el moderno parsi una sílaba del zend, así para el católico medio el latín no es más que jeroglíficos. El resultado es que los tres –el alto sacerdote brahmánico, el mobed zoroastriano, y el pontífice católico-, tienen ilimitadas oportunidades para desarrollar nuevos dogmas religiosos salidos de las profundidades de sus propias suposiciones, para beneficio de sus respectivas iglesias.

Para anunciar este gran día se hacen repicar alegremente las campanas a la medianoche, a través de Inglaterra y del continente. En Francia e Italia, después de la celebración de la Misa en iglesias magníficamente decoradas, “es habitual que los festejantes participen de una colación (réveillon) para que puedan soportar mejor la fatiga de la noche”, dice un libro que trata de los ceremoniales de la iglesia papista. Esta noche de ayuno cristiano recuerda a uno uno el Sivarâtri de los seguidores del dios Siva, - el gran día de tristeza y ayuno, en el undécimo mes del año hindú. Solamente en este último la larga noche de vigilia es precedida y seguida por un estricto y rígido ayuno. Nada de réveillons ni compromisos para ellos. En verdad, ellos son los perversos “paganos” y por lo tanto su camino hacia la salvación debe ser diez veces más duro.

Aunque ahora es universalmente observado por las naciones cristianas como el aniversario del nacimiento de Jesús, el 25 de diciembre no era originalmente aceptado como tal. De los más móviles entre los días festivos cristianos, durante las primeras centurias, la Navidad era frecuentemente confundida con la Epifanía, y celebrada en los meses de abril y mayo. Como nunca existió algún registro auténtico, o prueba de su identificación, tanto en la historia secular como en la eclesiástica, la selección de aquel día permaneció durante mucho tiempo siendo opcional, y fue solamente durante el cuarto siglo que, impulsado por Cirilo de Jerusalén, el Papa (Julio I) ordenó a los obispos que hicieran una investigación, y así es como finalmente se llegó a un cierto acuerdo sobre la fecha presumible de la natividad de Cristo. ¡Su opción recayó en el 25 de diciembre, y desde entonces se ha probado que ha sido la más desafortunada elección! Fue Dupuis, seguido por Volney, quienes asestaron los primeros golpes a este natalicio. Probaron que durante incalculables períodos antes de nuestra era, basados en datos astronómicos muy claros, casi todos los pueblos antiguos habían celebrado el nacimiento de sus dioses solares en ese mismo día. “Dupois dice que el signo celestial de la VIRGEN Y EL NIÑO existía desde varios millares de años antes del nacimiento de Cristo” –comenta Higgins en su Anacalypsis
[1]. Como Dupois, Volney y Higgins pasaron todos a la posteridad como infieles y enemigos del Cristianismo, y bien podemos citar también, en esta relación, las confesiones del obispo cristiano de Ratisbona, “el hombre más instruido que produjo la Edad Media” –el dominico Alberto El Magno. “La señal de la virgen celestial se eleva sobre el horizonte en el momento en el cual fijamos el nacimiento del señor Jesucristo”, afirma[2]. También Adonis, Baco, Osiris, Apolo, etc., nacieron todos el 25 de diciembre. La Navidad llega en el momento del solsticio de invierno; los días entonces son más cortos, y es mayor la Oscuridad sobre la faz de la tierra. Se creía que todos los dioses solares nacían anualmente en esta época, porque desde ese momento en adelante la Luz disipaba cada vez más la oscuridad a medida que se sucedían los días, y el poder del Sol comenzaba a aumentar.

De este modo puede ser que, las festividades de Navidad que fueron llevadas a cabo por los cristianos durante casi quince siglos, hayan tenido un carácter particularmente pagano. Incluso, tememos que las actuales ceremonias de la Iglesia difícilmente puedan escapar al reproche de estar copiadas casi literalmente de los misterios de Egipto y Grecia, realizadas en honor de Osiris y Horus, Apolo y Baco. Tanto Isis como Ceres fueron llamadas “Vírgenes Santas” y un NIÑO DIVINO puede ser encontrado en cada religión “pagana”.

Ahora dibujaremos dos cuadros de Feliz Navidad; uno que retrata los “buenos viejos tiempos”, y otro, el estado presente de la adoración cristiana. Desde los primeros días de su establecimiento como Navidad, el día fue considerado desde la doble óptica de una sagrada conmemoración y de una festividad más alegre: fue igualmente determinada como de devoción, mérito y significado desmesurados. “Entre los divertimentos de la estación navideña estaban los banquetes denominados de tontos y de asnos, grotesca saturnalia, que eran designadas las ‘liberalidades de diciembre’, en que todo aquello que fuese serio era satirizado, el orden de la sociedad subvertido, y sus decencias ridiculizadas.” –dice un compilador de antiguas crónicas. “Durante la Edad Media fue célebre por el espectáculo fantásticamente alegre de los misterios dramáticos ejecutados por personajes con máscaras grotescas y trajes singulares. El show era usualmente representado por un niño en una cuna, rodeado por la Virgen María y San José, por cabezas de toros, querubines, Magos de Oriente (los Mobeds de antaño) y múltiples ornamentos.” La costumbre de entonar cánticos navideños, llamados carolas, era para recordar las canciones de los pastores en la natividad. “Los obispos y el clero se unían a menudo al populacho al entonar carolas, y las canciones eran estimuladas por danzas, y por la música de tambores, guitarras, violines y órganos…” Podemos constatar que aún en los tiempos presentes, durante los días que preceden la Navidad, tales misterios están siendo representados por marionetas y muñecos, en el sur de Rusia, Polonia y Galicia, siendo conocidas como el Koliadovki. En Italia, los trovadores calabreses descienden de sus montañas hacia Nápoles y Roma, y se aglomeran en las capillas de la Virgen María, alegrándolas con su música salvaje.

En Inglaterra, los festejos iniciaban usualmente en la víspera de la Navidad y continuaban frecuentemente hasta la Fiesta de las Candelas (2 de febrero) siendo cada día feriado hasta la décima segunda noche (6 de enero). En las casas de los grandes nobles era designado un “señor de la confusión”, o “abad de la locura”, cuyo deber era hacer el papel de bufón. “La despensa era llenada con capones, gallinas, pavos, gansos, patos, carne de vaca, cordero, cerdo, tortas, pasteles, nueces, ciruelas, azúcar y miel.” … “Un fuego intenso, hecho de grandes troncos, el principal de los cuales era designado ‘tronco de Yule’, o bloque de Navidad, el que podía arder hasta la víspera de la Fiesta de las Candelas, resguardaba del frío del exterior; y la abundancia era compartida por los súbditos del señorío en medio de la música, conjuros, enigmas, berberechos calientes, bromas de campo, chanzas, risas, juergas, juegos de prendas y danzas.”

En nuestros tiempos modernos, los obispos y los clérigos no se mezclan más con el populacho en carolas y danzas abiertas; y las fiestas de “tontos y asnos” son realizadas más en la sagrada privacidad que a la vista de los peligrosos reporteros de ojos agudos. Con todo, las festividades destinadas al comer y al beber se preservan a través del mundo cristiano; y, más muertes súbitas son causadas sin duda alguna por la glotonería y la intemperancia durante las fiestas de Navidad y Pascua, que en cualquier otro momento del año. Aun así, la adoración cristiana se torna cada año más y más un falso pretexto. La insensatez de este palabrerío fue denunciada innumerables veces, pero nunca, pensamos, con un toque más pleno de realismo que en un encantador cuento de ensueños que apareció en el diario New York Herald en la última Navidad: un viejo hombre, mientras presidía una reunión pública, dijo que aprovecharía la oportunidad para comentar una visión de que fuera testigo la noche anterior.

…El visualizó que se encontraba en el púlpito de la catedral más deslumbrante y magnífica que hubiese tenido oportunidad de ver. Ante él estaban el padre o pastor de la iglesia, y a su lado un ángel con una tableta y un lápiz en sus manos, cuya misión era hacer el registro de todo acto de adoración u oración que aconteciera en su presencia y que ascenderían como una ofrenda aceptable al trono de Dios. Cada uno de los bancos estaba ocupado con adoradores de ambos sexos ricamente ataviados. La música más sublime que jamás haya descendido sobre su embelesado oído llenó el aire con su melodía. Transcurrió todo el bello ritual del servicio de la Iglesia, inclusive un enaltecedor y elocuente sermón del talentoso ministro ya había acontecido, a costa de mucho sudor, ¡y el ángel registrador no había hecho aún ninguna anotación en su tableta! La congregación ya se despedía, dispensada por el pastor con una prolongada y bella oración, seguida por una bendición, ¡y el ángel aún no anotaba siquiera un signo!

...Siendo aun observado por el ángel, el orador dejó el salón por la puerta posterior de la iglesia, retirándose de la congregación ricamente ataviada. Una pobre y desarrapada mendiga estaba parada en la cuneta al lado de la acera, con su pálida y famélica mano extendida, implorando silenciosamente por limosna. En cuanto los ricamente vestidos feligreses de la iglesia pasaban delante de ella, esquivaban a la pobre Magdalena, y las señoras corrían a un lado sus trajes de seda, sus mantos adornados con joyas, para que no los tocase y no fuesen contaminados por su roce.

...Fue entonces que apareció un marinero borracho que venía tambaleándose por la vereda de enfrente. En cuanto llegó a la altura de la pobre y abandonada muchacha, cruzó la calle hasta donde estaba parada, y, sacando algunos centavos de su bolsillo, él los depositó en su mano, acompañándolos con la siguiente exclamación: "¡Aquí, pobre maldita y abandonada, toma esto!" Un brillo celestial iluminó entonces la faz del ángel registrador que inmediatamente volcó en su tableta el acto de condolencia y caridad del marinero, y partió llevándolo como sacrificio a dios.

Una concreción, alguien podría decir, de la historia bíblica del juzgamiento de la mujer acusada de adulterio. Pero aún cuando así sea, con todo retrata con mano maestra el estado de nuestra sociedad cristiana.

Según la tradición, en la Víspera de Navidad los bueyes siempre pueden ser encontrados sobre sus rodillas, como estando en oración y devoción; y “había un famoso espino en el patio de la iglesia de la Abadía de Glastonbury que siempre brotaba en el día 24 y florecía en el día 25 de diciembre"; lo que, considerando que el día fue escogido por los padres de la iglesia al azar, y que el calendario se ha cambiado del antiguo al nuevo, ¡demuestra una perspicacia notable del animal y del vegetal! También hay una tradición de la iglesia, preservada hasta nosotros por Olaus, el arzobispo de Upsala, según la cual, en el festival de Navidad, "los hombres que viven en las localidades frías del norte, repentina y extrañamente se transforman en lobos; y que una multitud enorme de ellos se reúne en un lugar designado y se enfurecen ferozmente contra la humanidad, y que en esta época ella sufre más de sus ataques que de los lobos naturales."
[3] Observado metafóricamente, esto parece ser, más que nunca, el caso de los hombres, y ahora particularmente de las naciones cristianas. No parece haber ninguna necesidad de esperar hasta la Víspera de Navidad para ver naciones enteras transformadas en "bestias salvajes"—especialmente en tiempos de guerra.

[1] [Vol. I, p. 313.]
[2] Este pasaje proviene del Anacalypsis de Godfrey Higgins, Vol. I, p. 314, donde atribuye estas palabras a Albertus Magnus y da como referencia el “Lib. De Univers.” – Compilador.

[3] [Olaus Magnus, A Compendious History of the Goths, Swedes and Vandals, and other Northern Nations. Traducido del original en latín, Londres, 1653. —Compilador.]

LA VOLUNTAD Y EL DESEO

(Will and Desire, Lucifer, oct. 1887)

H. P. Blavatsky

La voluntad es posesión exclusiva del hombre en este nuestro plano de conciencia. Lo divide del bruto en el que sólo está activo el deseo instintivo.

El deseo, en su aplicación más amplia, es la fuerza creativa en el Universo. En este sentido es indistinguible de la Voluntad: pero nosotros los hombres nunca conoceremos el deseo bajo esta forma mientras sólo permanezcamos como hombres. Por consiguiente, la Voluntad y el Deseo son considerados aquí como opuestos.

Es así como la Voluntad es la progenie de lo Divino. del Dios en el hombre, el Deseo es la fuerza motriz de la vida animal.

La mayoría de los hombres viven en y por el deseo, confundiéndolo con la voluntad. Pero aquél que quiera lograr la realización, deberá separar la voluntad del deseo, y hacer de su voluntad el gobernante, ya que el deseo es inestable y, siempre está cambiando mientras que la voluntad es firme y constante.

Tanto la voluntad como el deseo son creadores absolutos. que forman al hombre mismo y, las circunstancias que lo rodean. Pero la voluntad crea inteligentemente –mientras que el deseo ciega e inconscientemente. Por lo tanto, el hombre se hace a sí mismo a la imagen de sus deseos, a menos que se cree a sí mismo a la semejanza de lo Divino. a través de su voluntad, la hija de la luz.

Su tarea es doble: despertar la voluntad. reforzándola por el uso y la conquista, para hacerla regidora absoluta dentro del cuerpo: y en paralelo a esto, purificar el deseo. El conocimiento y la voluntad son las dos herramientas para el logro de esta purificación.

lunes, 5 de enero de 2009

OMNIPRESENCIA DIVINA

Bernardo Palacio Mejía

Dios está en el reflejo
de la estrella lejana,
en la luna que sueña
sobre el verde palmar,
en la voz misteriosa
de la vieja campana,
en el nido del ave,
en la selva, en el mar.
Dios está en la plegaria
dolorosa y sentida,
del que lleva en el alma
un profundo dolor.
Dios está en el capullo
do se plasma la vida,
en la sangre, en el triunfo,
en la espiga, en la flor.
Dios es luz que fulgura
como rayo celeste
en la mente del hombre
para hacerlo genial,
es el canto del ave
amoroso y agreste,
oh misterio que el hombre
jamás descifrará.
Dios está en la ternura
de la madre amorosa
que a su hijo le canta
para hacerlo dormir,
en el alma sencilla
de la niña virtuosa,
o en la casta violeta
del lejano jardín.
Dios está en el rocío
estival de las flores,
en el niño que eleva
al Señor su oración,
en la mano que cura
con piedad los dolores,
o en las penas profundas
que nos deja el amor.

FELICIDAD

Miguel Nario

Revista Evolución Julio de 1942. Argentina.

FELICIDAD!... Meta ideal. Aspiración suprema. ¡Qué lejano está tu reino, para esta pobre humanidad! De esta pobre humanidad, que te busca sin encontrarte.

¡Es que tan pocos poseen el secreto! Todos intentan llegar a tí, pero de qué forma... Aspiran llegar a tu reino, todo luz y van por la senda, cargados de tinieblas. Quieren llegar hasta tu reino, todo armonía y la anarquía completa domina su espíritu. Desean llegar hasta tí, oh, esplendoroso reinado del amor ¡y cuánto pesa su mochila, cargada de odio! Y, más aún, el ser, va encerrado en sí mismo con su egoismo, pensando sólo para sí; queriendo ser feliz, él sólo, ignorando por consiguiente, que nuestra felicidad se elabora, al trabajar para conseguir la felicidad de otros.

Debemos, pues, ser un perpétuo ofrecimiento de todo lo bello que podamos albergar y dar, no pensando en la recompensa, sino en el bien que hacemos y por la satisfacción que implica, el aliviar el dolor del hermano en desgracia.

¿Cómo podríais ser felices, viviendo rodeados de desgraciados? Si te sustraes al medio; si no miras o si miras sin ver, y consigues relativa "felicidad", con ese proceder, ¡qué ignorante eres! Porque llegará fatalmente el día que los hechos te harán ver y entonces comprobarás que has añadido a tu cadena, otro eslabón, quizá el más infamante: el del egoísmo.

El Mártir del Gólgota, hizo incondicional entrega de todo su ser: alma y cuerpo. ¿Por qué? Para hacer a la humanidad más comprensiva; menos egoísta; más amorosa y fraternal. El buscaba la felicidad de la descarriada humanidad y sabía que solamente sería feliz, el día que imitando su ejemplo, elevando su alma hacia las alturas para fortalecerse, se dedicará empeñosa a hacer feliz al prójimo y sintetizó su doctrina en las sublimes palabras: ¡Ama a tu prójimo, como a tí mismo!
¡Como a tí mismo!... El sabía como nadie de nuestro colosal egoísmo; sabía que nos desvivíamos por nosotros y que dedicábamos todos nuestros afanes, para conseguir nuestro bienestar, sea como fuere y a costa de lo que fuere.

El comprendía que cuando amáramos al prójimo como a nosotros mismos, habríamos realizado ya una gran jornada y a esa altura de la Senda, felices debemos ser, porque somos casi perfectos y perfección es armonía y armonía, felicidad.

Consigamos pues la armonía en nuestro interior y una vez conseguida procuremos que éste, el otro y el de más allá, también se armonicen y a su vez estos, armonizarán a otros. Es decir, los pondrán en vías de realizar el milagro de ser felices.

Al realizar esta obra nuestra alma empieza a sentirse feliz; feliz por lo que ha dado. Antítesis grande con aquellos que para conseguir la felicidad, en vez de darse, acaparan. Aúnan los esfuerzos ajenos para alcanzar su propio bienestar. (Pero, ¡ah! cuando llega la hora final, cómo abren espantados los ojos al ver sus vidas tan vacías, tan vacías...)

Armonízate, pues, hermano. Llena tu vida de amor. Repártelo a manos llenas. Pon todas las facultades y potencias de tu alma, al servicio de tus hermanos; trata de que sean felices y verás con asombro, que sin advertirlo has ido labrando tu felicidad y sean cuales fueren tus pruebas y tus dificultades, que en tu marcha se interpongan, no conseguirán amargar a tu alma, que luminosa y radiante, estará inmunizada contra estos pasajeros inconvenientes.

Vamos hermano a ser felices, consiguiendo la felicidad de otros.

Dios desde lo alto, sonreirá complacido.

domingo, 4 de enero de 2009

PECAR

En la armonía eterna, pecar es disonancia;
pecar proyecta sombras en la blancura astral
El justo es una música y un verso, una Fragancia
y un cristal.

En la madeja santa de luz de los destinos,
pecar es negro nudo, tosco nudo aislador.
Pecar es una piedra tirada en los caminos
del amor...

Pecar es red de acero para el plumaje ingrávido;
membrana en la pupila que quiere contemplar
el ideal, parálisis en el ensueño, ávido
de volar.

Oh mi alma, ya no empeñes tu pura esencia ignota;
no te rezagues de la bandada velóz,
traza una gran "V" trémula en la extensión remota.
Oh mi alma, une al gran coro de los mundos, la nota
de tu voz.

AMADO NERVO
(M. S. T.)

LA TEOSOFÍA POR MEDIO DEL ARTE

Jean Delville. El artista y teósofo por excelencia. Obra: Los Tesoros de Satán


LA TEOSOFÍA POR MEDIO DEL ARTE

E. Carlile

Publicado en la Revista Dharma, órgano de la S. T. México. Marzo-Abril 1965.

Las artes visuales, especialmente la pintura y la escultura, junto con la poesía, la música y el drama, en sus más grandes formas expresivas, tienen la posibilidad de llevar a nuestra conciencia algún indicio de un mundo de perfección divina, armonía y belleza, del cual normalmente apenas tenemos percepción remota. Como todas estas artes tienen la capacidad de elevar nuestra perceptibilidad, puede ser de interés el examinar un aspecto muy obvio que distingue el arte visual de las otras artes y ver cual es la vía particular en que pueden encaminarnos hacia una percepción elevada. La diferencia mayor es que la pintura y la escultura son esencialmente estáticas y silentes; y por medio de la quietud y el silencio su belleza o mensaje de armonía divina tiene para nosotros una cualidad ajena al tiempo; y si nos tornamos suficientemente perceptivos respecto del mundo de perfección en el que los opuestos se hallan en armonía, podemos percibir el impacto de esas obras de arte inmediata y directamente.
Muchos artistas han tratado de contrarrestar la limitación aparente de la quietud por medio de la creación, con variados grados de éxito, la ilusión de movimiento. Donde el movimiento se ha vuelto compuesto porque su idea subyacente es mayor que él, el artista probablemente ha alcanzado el éxito; pero tal vez aquellos que han comprendido mejor las posibilidades en la limitación de su medio son aquellos que han hecho uso de él creando imágenes que a través de su quietud expresan la potencialidad y la posibilidad de movimiento infinito. Si miramos obras de arte de los mejores períodos de la escultura egipcia y budista, podemos ver los ejemplos de esto, pues que sus creadores comprendieron esta limitación del medio e hicieron bellas y arrobadoras imágenes que parecen estar mirando la eternidad en contemplación silenciosa. Esta es quietud potente y poderosa que contiene en sostenido reposo las posibilidades de todos los ritmos y todo movimiento. Es como si en virtud de la visión que el artista nos ha dado, nosotros pudiéramos mirar fijamente (siquiera sea momentáneamente) la unidad omniabarcante de la eternidad.
La grande obra de arte, por lo tanto, puede ser un punto focal por medio del cual podamos comprender lo divino que se halla más allá, o alternativamente él puede hacer brotar desde lo profundo de nosotros mismos un sentir de lo divino que yace en lo hondo de lo interno. Así como el sacerdote al celebrar sus rituales se convierte en canal para el derrame de las fuerzas divinas sobre los hombres, de igual manera el grande artista puede con su creación convertirse en punto focal a través del cual puedan fluir la armonía perfecta y la belleza divina –belleza que es sublime y aterradora. En un solo momento de tiempo el observador puede volverse consciente de la unión de fuerzas contrarias en un todo armónico. El impacto en él puede ser tal que los procesos intelectuales de percepción sean desechados. En su lugar, el observador se convierte en parte de un proceso de doble vía entre la idea inherente en la creación del artista y la correspondiente del mismo. Este proceso de comprensión directa, estando más allá del pensamiento y sus complejidades, yace fuera del tiempo. Repentinamente el observador puede experimentar esta sensación: “Lo se –eso es así, es así como es- esto es sin duda verdad y belleza”. Con este conocimiento repentino viene la certeza; para él, el observador, el impacto visual estético ha alcanzado significación más allá de la lógica y la razón.
Todos nosotros no podemos ser conmovidos de esa manera por la misma obra de arte. Con nuestra infinita variedad de complejidades humanas y nuestros gustos y desagrados es imposible que todos podamos responder de igual manera. Afortunadamente la gran variedad de obras de arte asegura que hemos de ser atraídos por aquellas que evoquen respuesta favorable en nuestro interior.
¿Qué es lo que el artista hace por nosotros y cómo ha conseguido abrir para nosotros la visión de otras dimensiones por medio de sus creaciones? El ha aprendido sea por medio del conocimiento de su maestro, sea en virtud de su percepción innata, a seleccionar lo que da la significación más grande a fin de expresar las ideas que él siente ser el factor importante que subyace allende nuestro mundo manifestado, ideas que pertenecen a la esfera de lo ideal o lo perfecto. El ideal es siempre aquello que está fuera del alcance o más allá de nuestra obtención; y de este modo tenemos preceptos de percepción que, como el caso de los egipcios y los griegos, sugieren la posibilidad de un hombre ideal, el hombre perfecto, semejante a Dios, y no el ser imperfecto de cada día que la mayor parte de nosotros mostramos ser en comparación con esas idealizaciones. Según dijo Goethe, “Nosotros debemos pintar la Naturaleza no como ella es, sino como ella ha de ser”. El artista o escultor ha de cortar sin piedad lo superfluo, y ha de dar énfasis a lo esencial y más bello en potencia hasta alcanzar ritmo y armonía que den verdadero significado a su creación. Esto ha de requerir muchas y variadas formas en tiempos diferentes; y a menudo hay correspondencia interesante entre la visión de un gran artista y las ideas de los sabios que en alguna manera las unen. Tomemos como ejemplo al artista comparativamente moderno, Vincent Van Gogh, y miremos sus últimas obras. Vemos un movimiento ondulante, vibrante y rítmico que surge a través de todas sus formas, un ritmo único según su propia visión, en el que las rocas parecen tener movimiento, y los árboles, los campos y las nubes parecen estar a punto de estallar en remolino de llamas que quisieran llevarse al hombre consigo. Esta cualidad que él encontró en la naturaleza debe recordarnos al filósofo griego Heráclito, quien sostenía que “todo está en estado de flujo”. También parece que esto tiene algo en común con los recientes descubrimientos de la ciencia.
Cuanto más pura, directa y en cierto modo pueril en su incondicionalidad es la visión del artista, tanto mayor es la posibilidad de que él nos abra los ojos en la dirección de mundos desconocidos. Esto no se refiere al descarte de todas las enseñanzas del pasado y a interesarse puramente en fragmentos de lo inconsciente, sino a una verdadera concepción capaz de hacer uso de lo condicional que todavía permanece incondicional. Descartar el pasado no ha de resolver nada si no tenemos la capacidad de ver el presente. Lo que tenemos del pasado es herencia nuestra, especialmente en las artes visuales, y ello puede ser herramienta útil que puede emplearse con ventaja si solamente somos capaces de hallar, por medio de la percepción discerniente, los indicios a través de las edades, hacia la realidad y la verdad, indicios que fueron dejados por nuestros predecesores, cuya perspicacia puede haber sido mayor que la nuestra. Así pues, es por medio de esos indicios que examinamos la acumulación de obras de arte visual.
Los excelentes ejemplos del empleo consciente de la pintura para ayudar al hombre a conocerse a sí mismo y de ese modo llegar a conocer la sabiduría de Dios, son los mandalas de la India y el Tibet (pinturas simbólicas basadas en la estructura de la cruz dentro del círculo) y los iconos de la Iglesia Ortodoxa Griega. Aquellos que pusieron en servicio activo a los creadores de esas pinturas fueron plenamente conscientes de las fuerzas potentes que pueden liberarse en el hombre y ser usadas por él al mirar imágenes y símbolos.
Dentro del rígido marco de la tradición, exacto en sus demandas y litúrgico en su aplicación, el pintor de iconos o imágenes llegó a orientarse hacia la expresión de la espiritualidad por medio de la aplicación concentrada de su imaginación en el área limitada de libertad que le era permitida dentro de esa estructura. Libre de la ansiedad de lo que debía pintar y cómo debía pintar, él pudo poner en acción lo mejor de su habilidad en la actual obra de pintar, sumergiendo en ella su identidad al ejecutarle.
En nuestros días el artista, por la mayor parte, depende para su supervivencia en el desarrollo del culto de la personalidad y requiere tiempo para los detalles del experimento de cómo pintar. La moda en el arte no representativo deja ver que en grande medida él no sabe qué pintar. Esto no sucedía con los pintores de iconos y mandalas, quienes, trabajando dentro de sus tradiciones fijas, sabían lo que se requería de ellos. Dedicando su trabajo a la gloria y sabiduría de Dios, fueron capaces de dar de sí mismos lo mejor y, al hacerlo, nos dicen los estudiantes de estas materias, encontraron libertad espiritual profunda y verdadera. El profesor Giuseppe Ticci en su libro Teoría y Práctica de los Mandalas tiene puntos interesantes con respecto a las posibilidades liberadoras del mandala y la libertad a encontrarse dentro de su rígida estructura. Por ejemplo:
Cuando el artista indiano o tibetano diseña un mandala, no obedece el mandato arbitrario del capricho. El sigue la tradición definida que le enseña como representar, de manera especial, el mismísimo drama de su alma. No representa en el mandala las imágenes frías de un texto iconográfico, antes bien vierte en él los fantasmas de su ego subconsciente y de ese modo los conoce y se liberta de ellos. El da forma a ese mundo que siente agitarse en su interno y lo ve apartarse ante sus ojos, dejando de ser por más tiempo el amo invisible y desenfrenado de su alma, convirtiéndose en representación simbólica y serena que le revela el secreto de las cosas y de él mismo. Esta complicada yuxtaposición de imágenes y su disposición simétrica, esta alternación de calma y figuras amenazadoras son el libro abierto del mundo y el propio espíritu del hombre.

The Theosophist. Adrar, Agosto 1962.

viernes, 2 de enero de 2009

ORIGEN DE LA PALABRA " DIOS "

H.P.Blavatsky

Capitulo III del libro " Los orígenes del Ritual en la Iglesia y en la Masonería".


Comencemos con el origen de la palabra Dios, God en inglés. ¿Cuál es la significación verdadera y primitiva de este término?. Sus significados etimológicos son tan numerosos como variados. Según uno de ellos, la palabra se deriva de un término persa antiquísimo y muy místico: Goda, el cual quiere decir " El mismo", o algo emanante por sí mismo del Principio absoluto. La raíz de esa palabra es Godan, de donde se derivan Wotan, Woden y Odin; de forma que la raíz radical oriental no ha sido casi alterada por las razas germánicas que formaron con ella la voz Gotz, de la cual derivaron el adjetivo Gut, " Good" ( bueno en inglés ) y el término Goda o ídolo. Las palabras Zeus y Theos de la antigua Grecia dieron origen a la palabra latina Deuz. Goda, la emanación, no es ni puede ser idéntica a aquello de lo que emana y por consiguiente, es tan sólo su manifestación periódica y finita. Cuando el antiguo Arato dijo que " Todos los caminos y mercados frecuentados por los hombres están llenos de Zeus: llenos de El están los mares y también los puertos", no limitaba la idea de Dios a un mero reflejo temporal suyo sobre nuestro plano terrestre, como lo es Zeus o su antecedente Dyao, sino que daba a la palabra la extensión de un principio universal y omnipresente. Antes de que Dyao, el deslumbrante dios ( el cielo ) hubiera atraído la atención del hombre, existía ya el védico Tat "aquello"- ( that en inglés), el cual no tiene ni para el filosofo ni para el iniciado nombre alguno definido, porque es la noche absoluta, oculta bajo toda la radiante luz manifestada. Pero no se pudo evitar que el Sol, primera manifestación en el mundo de Maya e hijo de Dyao, fuese llamado por los ignorantes " El Padre", como lo fue también el mítico Júpiter, última y significativa reflexión de Zeus-Surya.

De manera que el sol llegó rápidamente a ser sinónimo de Dyao y fue confundido con él. Para unos, era el Hijo; para otros, "el Padre", que mora en el radiante cielo. Sin embargo, Dyao-Pitar, el Padre en el Hijo y el Hijo en el Padre, tiene origen finito, puesto que le fue concedida la Tierra como esposa. Durante la gran decadencia de la filosofía metafísica fue cuando comenzó a representarse a Dyava-prithivi, " el Cielo y la Tierra ", en forma de padres universales y cósmicos, no sólo de los hombres, sino también de los dioses. El poético y abstracto concepto original de la causa ideal acabó por corromperse. Dyao, el Cielo, llegó a ser rápidamente Dyao el Paraíso, la morada del "Padre" y , finalmente el mismo Padre. En seguida el Sol fue transformado en símbolo del Padre y recibió el título de Dina Kara, "el que crea el día", y de Bhaskara,"el que crea la luz", siendo desde ese momento el Padre de su Hijo y viceversa.

A partir de entonces se estableció el reino del ritualismo y del culto antropomórfico que terminó por envilecer al mundo entero, extendiendo su supremacía hasta nuestra época llamada civilizada.

Una vez se ha visto que éste es el origen común, sólo nos resta establecer el contraste entre los dos dioses- el dios de los gentiles y el de los judíos- y deducir intuitivamente, basándonos en su propia revelación y juzgándoles de acuerdo con su definición, cual de los dioses se encuentran más cercad del ideal más sublime.

Citemos al coronel Ingersoll el cual ha establecido un paralelismo entre Jehová y Brahma. Jehová, oculto tras las nubes y tinieblas del Sinaí, dice a los judíos:

"No tendrás dioses ajenos delante de mí. No te prosternarás delante de sus imágenes, ni las honrarás, porque yo soy Jehová, tu Dios,fuerte, celoso, que visitó la maldad de los padres sobre los hijos, hasta la tercera y cuarta generación de aquellos que me aborrecen , a fin de que me teman."

Compárense estas palabras con las que pone un hindú en boca de Brahma: "Yo soy el que participa en toda adoración; yo, la recompensa de todos los adoradores". Compárense ambos párrafos. El primero es un lugar oscuro en que se insinúan cosas que nacen del fango; el otro, grande como el firmamento cuya bóveda está sembrada de soles.

El primero es el dios que atormentaba la imaginación de Calviño, cuando añadía a su doctrina de la predestinación, la del infierno tapizado de cráneos de niños no bautizados. Las creencias y los dogmas de nuestras iglesias son tan blasfemas por las ideas que implican como las de los paganos que se hallan sumergidos en las tinieblas...

Ya pueden disfrazar y enjalbegar cuanto quieran al Dios de Abraham y de Isaac, que nunca serán capaces de refutar las palabras de Marción, quien niega que el Dios del odio, pueda ser el mismo Dios que el " Padre de Jesús ". Sea como sea, herejía o no, el " Padre que está en los cielos" ha seguido siendo, a partir de esa época, una criatura híbrida una mezcolanza del Jave ( Júpiter ) de los paganos con el " Dios celoso" de Moisés, Dios que, exotéricamente es el sol, cuya morada se encuentra en los cielos y , esotéricamente, es el cielo.

¿No da Él nacimiento a la luz, "que brilla en las tinieblas "?; al día al brillante Dyao, al Hijo, y, ¿ no es Él acaso, el Altísimo Deus coelum?; ¿ Y, no es Terra , la Tierra, la Virgen eternamente inmaculada, que engendrando sin descanso, fecundada por el ardiente abrazo de su " Señor ", - los vivificantes rayos solares - se convierte en madre en todo cuanto vive y respira en el vasto seno de la esfera terrestre ?. Esto explica el carácter sagrado que tiene en el ritual lo que ella produce: o sea, el pan y el vino. De ahí también la antigua messis para los iniciados, missa para los profanos, (1) ,que ha llegado a ser hoy en día, la misa o liturgia cristiana. La antigua ofrenda de los frutos de la Tierra hecha al Sol, al Deus Altíssimus, - el símbolo del G.A.D.U. de los Francmasones contemporáneos- , llegó a ser la base más importante del ritual entre las ceremonias de la nueva religión. Las parejas místicas (2) Osiris e Isis ( el sol y la tierra ) de los egipcios; Bel y la cruciforme Astarté de los babilonios; Odin o Thor, y Freya, de los escandinavos; Belén y la Virgo Paritura de los celtas; Apolo y la Magna Mater de los griegos, - las cuales tenían idéntica significación- , pasaron como representació n corporal a los cristianos, y fueron transformadas por ellos en el Señor-Dios o el Espíritu Santo que desciende sobre la Virgen María.

El Deus Sol o Solus, o sea el Padre, llegó a confundirse con el Hijo; el " Padre" que brilla deslumbrador en la hora del Mediodía, transformábase al amanecer en el" Hijo", en cuyo momento se decía el que " había nacido". Esta idea recibía su gran apoteosis anualmente el dia 25 de diciembre, durante el solsticio de invierno, cuando, según se decía, el sol - acabado de nacer- era igual para los dioses solares de todas las naciones Natalis solis invicte. Y el " precursor " del Sol resucitado, crece y se fortalece hasta el equinoccio de primavera, que es cuando el Dios-Sol comienza su curso anual bajo el reinado de Ram o del Carnero ( Aries), la primera semana lunar del mes.

En toda la Grecia pagana se conmemoraba el día primero de marzo, cuyas neumenias se consagraban a Diana. Por idéntica razón las naciones paganas celebaran su fiesta de Pascua el primer domingo siguiente a la luna llena del equinoccio de primavera.

El cristianismo no sólo ha copiado las fiestas del paganismo, sino también las vestimentas canónicas, cosa que es imposible negar. Eusebio confiesa en su 'Vida de Constantino' , diciendo quizás la única verdad proferida en su vida, que, "con el fin de hacer que el cristianismo fuera más atrayente para los gentiles, los sacerdotes (del Cristo) adoptaron las vestimentas externas y los ornamentos utilizados en el culto pagano, y podría haber añadido que habían hecho lo mismo con sus rituales y sus dogmas.

NOTAS.
1. De pro, "delante", y fanum, "el templo"; es decir, los que no están iniciados, los que se encuentran ante el templo sin atreverse a entrar.

2. La Tierra y la Luna su pariente, son similares.
Por eso todas las diosas lunares eran también símbolos representativos de la Tierra. ( Véase Simbolismo" de La Doctrina Secreta )

Teosofía para abogados

Geoffrey Hodson

The Theosophist April 1947

La ley humana, en su impersonalidad, imparcialidad y estricta justicia, como las matemáticas, es una expresión directa en la tierra de lo Divino en el Cosmos. La definición más elevada posible de Dios es la LEY, Principio Inmutable en virtud del cual todas las cosas grandes y pequeñas, macrocósmicas y microcósmicas, se conciben, se manifiestan, se densifican en su más alto grado, son pulidas, perfeccionadas y, finalmente, retiradas. En el macrocosmos todo es la LEY y la LEY lo es todo. Este es el más alto, más noble ideal de divinidad en Dios. Dios es la LEY inmutable.

Energía, Vida, Inteligencia, y forma son las bases de la Creación. Su existencia, aparición, la plena manifestación y retirada se producen en el marco del gobierno absoluto de la LEY perfecta.

El legislador y legalista en la tierra, sin importar lo mundanas que sus actividades puedan parecer, siguen una ocupación divina. La ley humana refleja la LEY divina. El hombre de leyes es un agente de esa LEY. El “toque del cielo” descansa sobre el erróneamente entendido como árido procedimiento de la administración de la ley.

Una parte del propósito de la LEY cósmica es producir seres humanos perfectos. Este objetivo del Cosmos debería ser siempre recordado por los administradores humanos de la ley. El verdadero propósito de las leyes de protección es menos castigar y más perfeccionar, menos limitar y más reorientar, nunca para destruir, siempre para elevar.

La función de la ley, internacional, nacional y civil es la vida perfecta, educar al individuo en el auto-control y en las correctas relaciones con quienes le rodean, así como establecer bases flexibles pero firmes para la civilización.

La justicia del hombre, por lo tanto, mientras exacta, debería administrarse siempre con miras al supremo y sublime propósito de la existencia humana. El ciudadano honesto es protegido, el deshonesto sancionado y el deliberadamente criminal castigado y separado, siempre con el fin de producir un fino tipo de hombre. Esa es la prueba del valor, e incluso la validez de cualquier ley, así como de la labor de todos y cada uno de sus administradores.

Parlamentarios en sesiones, los jueces en sus oficinas, los magistrados en sus puestos, los detectives y la policía, y todo el personal relacionado con la ley, idealmente debería guiarse por un sentido imparcial e impersonal de la justicia, así como por un reconocimiento de sus más grandes y menos mundanas funciones como servidores de las almas de los hombres, cada uno un peregrino viajando hacia la perfección bajo la LEY absoluta.

El aspecto penal de la ley humana presenta la mayor dificultad en la adhesión a este ideal. Los sentimientos humanos están inevitablemente involucrados. La justicia se hace menos imparcial en el grado en que surge y se implica la emoción. Esto tiende a ser especialmente cierto en el caso, tanto de aquellos que sufren a manos de los criminales, susceptibles como lo son al deseo de venganza, como para los trabajadores de las prisiones en los cuales recae la responsabilidad para el cumplimiento de los decretos de la justicia y el mantenimiento de la disciplina carcelaria. Porque la dificultad en este punto es de las más críticas, se debería tener el mayor cuidado en la formación y selección de tales oficiales. El espíritu de venganza, las prácticas crueles, la indebida aplicación de las medidas disciplinarias son contrarias tanto al espíritu imparcial de la justicia como al bienestar y el progreso de los procesados y condenados. Es aquí, en la actual etapa de la evolución humana, que la ley humana con más frecuencia falla en ambos objetivos. En este punto, por lo tanto, la reforma - período de sesiones, los jueces en el cargo, los Estatutos de una nación - debería acercarse más a esa estricta e imparcial justicia, que es el ideal. En última instancia, los agentes, los hombres y mujeres responsables a la hora de llevar a cabo las sentencias, pudieran estar muy lejos de ese ideal si se formaran erróneamente.

Bajo la LEY Cósmica, las penas para los delitos son siempre minuciosamente exactas en su adecuación al delito cometido. No existe la menor posibilidad de fallo conforme a la ley natural de causa y efecto ya que en este ámbito también son nombrados los administradores, así el progreso espiritual de la víctima de la ley en su aspecto correctivo nunca es ignorado. Muy por el contrario, es el único principio rector de todas las Inteligencias, que encarnando el principio de la LEY, son responsables de su aplicación a la acción humana.

Principalmente por extensión durante largos periodos de tiempo, pero también por los procesos de demora y las precipitaciones en favorables y desfavorables ocasiones, respectivamente, y también por equilibrar cuidadosamente los beneficios con las reacciones adversas de acciones anteriores, estas Inteligencias aseguran la estricta justicia para todos los seres humanos y, al mismo tiempo en la mayor medida posible la educación y por lo tanto, la asistencia evolucionaria. De modo similar permiten los resultados benéficos de la conducta digna, de los hechos nobles y de las acciones desinteresadas, en formas y en tiempos cuando el mayor beneficio evolucionario será obtenido de ellos.

Así como en la tierra una jerarquía de funcionarios desde el Ministro de Justicia hacia abajo es responsable de la administración de la ley humana en una Nación, así también en todos los niveles de la conciencia humana, física, psíquica, intelectual y espiritual, una Jerarquía de Inteligencias es responsable de la administración de la LEY cósmica.

Estos dos sistemas interactúan continuamente en el ser humano. En el proceso de interacción entre los dos, incluso los errores humanos y sus efectos en el aligeramiento o aumento del peso de las condenas también se producen en virtud de la LEY Cósmica, ya que han sido ganados por quien los recibe. Aquellos que yerran, sin embargo, a su vez generan reacciones cósmicas sobre sí mismos, siempre estrictamente proporcionales a la deliberación y el grado de error.

El error por falta de capacidad o de cuidadoso razonamiento, o por falta de atención especial y, por tanto, sin motivación de injusticia detrás de él, produce menos reacciones dolorosas que el error deliberado basado en la motivación de causar dolor injustamente. La Ley Cósmica es puesta incesantemente en movimiento por, y sobre el hombre. Al final, todos los decretos, sean inmediata y aparentemente benéficos o negativos en sus efectos, son educativos, enseñando especialmente que la violación de la LEY cósmica no paga. También en el largo plazo, debería basarse la ley humana sobre este principio básico.

El hombre sabio es el que por sus acciones ordena que todas las reacciones bajo la LEY Cósmica sean armoniosas. Actuando cada vez menos por motivos egoístas, viviendo su vida cada vez más y más como una manifestación impersonal del propósito cósmico que es la evolución, él no provoca la auto - modificación y la auto - dominación por la LEY cósmica. Él evita estos dos efectos de la acción egoísta y así obtiene la libertad y la serenidad individual. Nada externo, ni siquiera la LEY Cósmica, ya que él es su agente directo, tiene el poder de dar forma a su existencia, limitar sus actividades, o forzar experiencias sobre él. Él es auto – gobernado desde adentro. Es entonces no sólo sabio, sino el rey espiritual. Para la producción de esos hombres, la ley humana, como también la educación y la religión, deben ser diseñados y administrados.

Traducido por el novato que administra este blog. Sin revisar.